Los miro...
Su conciencia pétrea...
Su estado dormido...
no, no están dormidos...
atravesarían definitivamente esa frontera entre la vigilia
y el cosmos de lo onírico, recuperarían esa memoria recogida
en su inconsciente.
Recorrerían sus quimeras,
sus visiones,
sus alucinaciones,
sus espejismos,
sus fantasías, sus símbolos...
encontrarían la inquietud, se moverían
desde el sueño ...
2 comentarios:
"Llamamos a todos y a todas no soñar, sino a algo más simple y definitivo: los llamamos a despertar", decía una portavoz del EZLN hace ya unos años.
Yo, por mi parte, diría que, si algo nos enseñaron los surrealistas, jeje, es a evitar tanto el soñar como mera huida de la realidad como el considerar la observación de la realidad como anulación del sueño. Me parece que nos enseñaron a aceptar y apreciar las tres cosas: ver lo existente, soñar lo imaginable y buscar (y encontrar) lo posible y deseable que se encuentra más allá de lo evidente, en las posibilidades de lo existente.
Hay quien se recoge para expandirse con más fuerza y quien marcha hacia atrás para saltar con más ahínco. Hay quien se lleva horas en silencio para aprender. Desgraciadamente, no son la mayoría.
Me gusta tu blog, te recomiendo que eches un ojo al mío. Encontrarás un poco de ficción y verdades leves ;)
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